Como mucho da para un nobel a la paz póstumo, aunque desde que se lo regalaron a Obama tiene menos valor que el papel en el que esté escrito el diploma.
Una cosa del Opus, muy obvia en realidad, pero que a mí me sorprendió, es que muchos de sus locales asociativos están en Google maps y, por tanto, tienen reseñas. Como los opusinos intentan ser discretos, se hacen a sí mismos reseñas fantásticas omitiendo el pequeño detalle de que son del Opus, pero otras reseñas los desenmascaran. Es bastante impactante leer el mismo tipo de reseñas, mezcladas las espeluznantes y las elogiosas, repitiéndose en diferentes lugares.
No entiendo cómo, una asociación manifiestamente clericalista o, lo que es lo mismo, inconstitucional, tiene patente de corso en la justicia de éste país laico, cuando además, conculca mi derecho a ser y a manifestarme libremente como ateo.
Que conste que he buscado las palabras "Ranking" y "papables" antes de publicar para ver si estaba duplicada, pero parece que la búsqueda no funciona bien.
Ellos podrían preguntarse lo mismo: qué hacen cuando un país condena las atrocidades que está cometiendo el Estado genocida de Israel en Gaza. No pueden pretender que los demás actúen de forma diferente cuando los que están condenando ahora son ellos.
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