Me llama mucho la atención de tal acto de cerrar, ni lo había imaginado.
Claro que así se ahorran de responder a nadie, justificar nada y menos atender razones.
Lo que nos lleva a pensar que algo similar se debería hacer de vez en cuando en sentido contrario, cuando pidan, reclamen y exijan algo pues oídos sordos y no entender.
Si estuviéramos en un mundo decente, los países cerrarían esas embajadas permanentemente mientras Israel siga con su espiral genocida y criminal...
Pero vivimos en un mundo donde la primera potencia (y sus Minions) lo que hacen es acariciarles el lomo, darles más armas y acusar de antimesita al que se le ocurra cuestionar los crímenes de Israel...
latribuna.cl
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