Pues yo hablo de la ley.
Que es indudable que abundan los clericalistas cometiendo las tropelías que les son propias, también.
Pero yo hablo de la ley. Y la ley separa estado de religión. Dice que la religión no es el estado, sino la religión. Y que el estado no pondrá palos en las ruedas a ninguna religión. Ni siquiera, a la católica.... siempre que cumplan las leyes del estado.
Y tal cosa no veo yo que deba implicar vinculaciones o colaboraciones más imbricadas de las que se dan con los empresarios, los sindicatos, los camioneros... pues se reconoce como un colectivo.