xikufran a mis 15 años (hace casi 50) envié al entonces prestigioso medio "muy interesante" un alegato sobre "la nada" que yo entendía muy profundo e interesante. Me chafaron publicándose en cartas al director y haciéndome ver la diferencia entre la nada física, y la nada matemática.
Lo cierto es que ese dato me ayudó sobremanera a mejorar mi planteamiento, y con él, a descartar más la idea del dios creador.