Uno tiene una cuenta de Twitter y un clon de mastodon para mearse en todo el mercado global, el otro tiene las tierras raras que necesita el resto del mundo.
Y si se aprieta, lo mismo se da la paradoja de que va a dar igual que pongan aranceles de un gritón porciento. Si ellos producen y aquí en occidente no, pues pagaremos el sobrecoste en impuestos.
Que al mercado del colgado es fácil jugar con los que no tienen nada, pero no es el caso