Te has pasado desde tu creación decir que vas a revisar los privilegios de la secta. Y dándole la importancia que se merece al asunto continuamente
llegas a gobierno con toda una serie de puntos al respecto. No pasas de poner tweets y tal, lo aguantas casi cuatro años
ahora en la oposición vuelves al primer punto.
No es cosa de es mi equipo, o mal menor, o mierdas. Es coherencia, y ser útil, y forzar la agenda cuando se puede.
Porque si no se hace, ya me dirá alguien de que sirve la retórica