Casi, pero no.
La idea es meter como una cuarta parte de un tarro con lentejas, y una tercera parte con agua.
Se tapa con una gasa (para que respiren), y se deja en la despensa por ejemplo.
Cada día escurrir el agua, y volver a ponerles nueva. Más o menos durante unos 4/5 días.
La cosa es asegurarse de que acaban húmedas, pero que siguen teniendo espacio ya que crecen mucho de tamaño