Te has pasado desde tu creación decir que vas a revisar los privilegios de la secta. Y dándole la importancia que se merece al asunto continuamente
llegas a gobierno con toda una serie de puntos al respecto. No pasas de poner tweets y tal, lo aguantas casi cuatro años
ahora en la oposición vuelves al primer punto.
No es cosa de es mi equipo, o mal menor, o mierdas. Es coherencia, y ser útil, y forzar la agenda cuando se puede.
Porque si no se hace, ya me dirá alguien de que sirve la retórica
No seamos ingenuos, cuando se entra en un gobierno de coalición, y mas en clara minoría, no se consigue que se aplique tu programa electoral al completo, conseguirás algunas cosas pero tragarás con otras. Hay demasiadas cosas para batallar además de los privilegios de la secta que supongo que se pretendería y por la incongruencia del PSOE no salió.
Te sobra con ver la presente legislatura para ser consciente de que si plantas tus líneas rojas, y eres necesario en la aritmética parlamentaria... Se te hace caso:
Erc, junts e incluso podemos en estatal.
Vox pasando como una apisonadora en ayuntamientos y comunidades autónomas.
Si piensas que en lugar de estar a marcar tu agenda y programa, tú compromiso electoral se reduce a sostener al mal menor... Pues así estamos.
Lo dicho, es mucho mucho más profundo que enfundarse la camiseta de un equipo de fútbol y negar toda autocrítica. El fondo es para qué están los partidos en política.
Y por desgracia, los que se dicen de izquierdas en este estado están desde antes de Llamazares a hacer de muleta... Y quemando ilusión y ventanas de oportunidad.
Y de forma cíclica una vez demostrada que utilidad la justa, ni ventana ni representación.